Hasta que no dejes que el espíritu de la Navidad entre en ti, ésta no existirá.
Para ello, tan sólo debes abrir el corazón y compartir tu alegría con aquellos que te rodean.
Busca la felicidad en las pequeñas cosas y recuerda que tal vez tu sonrisa sea el mayor regalo que puedes dar.
Hola Jorgito,leo tu blog desde Vigo y me gusta mucho.Un saludo para la jefa y a seguir escribiendo
Publicar un comentario
1 comentario:
Hola Jorgito,leo tu blog desde Vigo y me gusta mucho.Un saludo para la jefa y a seguir escribiendo
Publicar un comentario