martes, 14 de octubre de 2008

Ballesteros en el hoyo más difícil de su vida

Es muy propio de los españoles no honrar a nuestros héroes (y los deportivos no son una excepción) más allá de la inmediatez del éxito presente. Esto es más acusado cuando se trata de un deporte minoritario como el Golf, que lo es cada vez menos. La cobertura informativa es escasa, puntual y poco apreciada. Por todo ello es relegado a un segundo o tercer plano.


Si esto lo hiciera otro, le hacen un ANUNCIO...



Y se lo hicieron, claro...



Severiano Ballesteros, ha pasado su época dorada como deportista e incluso más recientemente como capitán de la Ryder Cup, apartado a propia voluntad y en la medida de lo posible, de los focos y los micrófonos de la crónica social, -tantas y tantas veces pesada e incluso impertinente-. Ha preferido centrarse en sus verdaderas ocupaciones: las empresariales y sobre manera, familiares. Dicen quienes le conocen que es una persona reservada y que siempre ha procurado mantener unidos a los suyos. Un hombre generoso con su tierra, cántabro de excepción, de carácter humilde y de trabajo incesante.


Seve ha vuelto a ser portada de los informativos y ha llenado de preocupación los ríos de tinta de los diarios que se han volcado en averiguar en cual es el estado real de su salud: las alarmas se disparaban tras un desvanecimiento en un aeropuerto cuando se disponía a viajar. Ingresado, la falta de información provocada desde su entorno disparaba las especulaciones. Pero todo tenía sentido. Severiano había querido informar personalmente a sus tres hijos antes de dar a conocer el alcance de su dolencia a los medios. Sufre un tumor cerebral. En su propia página reconoce (linkar aquí) que la situación es difícil, pero como en otras muchas ocasiones, va a luchar por salvar todos los obstáculos que se le presenten.


En estos momentos sólo cabe mandar un mensaje de ánimo, fuerza y solidaridad a quien ha hecho tanto por un deporte casi desconocido por entonces y ahora en España, al que ha dado numerosos triunfos y alegrías. Seve, todos confiamos en que puedas recuperarte lo más rápido posible, vuelvas con los tuyos y te alejes otra vez de los medios hasta que tú y sólo tú quieras volver a ellos para darnos la mejor noticia que queremos leer, oír y ver. Te esperamos en Casa Club.

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