lunes, 17 de noviembre de 2008

Argentina no tiene educación ni quien se la ponga.

La Copa Davis está demostrando que Argentina no tiene educación ni la suficiente madurez para afrontar una final de tenis contra España. Tal vez alguno puedan ver la manera de vengar las andanzas de sus descubridores, allá por la época dorada de la que ellos llaman Madre Patria. Madre Patria solo para lo que interesa.


Han sido constantes las provocaciones de la afición y las considero auspiciadas por las autoridades deportivas que no cortan por lo sano ni reprueban dichas acciones. Las personalizan en Rafael Nadal, un deportista ejemplar que no ha abierto la boca. Tampoco ha levantado la voz la ni las estancias deportivas de nuestro país ni otros deportistas implicados. Mejor así. Para hablar mejor hacerlo en la pista. Pero sería engañarnos si pensáramos que lo que allí se van a encontrar nuestra selección, no es una encerrona antideportiva.

No es nuevo. La mano de dios, la del Kun y la de Messi demuestran generación tras generación que la trampa es aplaudida y arraigada en aquellas latitudes. Los argentinos se han caracterizado por una actitud siempre bronca. Tal vez se lo confiera el caracter de incultura del que surgen algunas de sus figuras, pero es impresionante la facilidad con la que se pegan los malos modos hasta en la clase política.

Una nación que ha sufrido los políticos que han tenido durante años, lustros y décadas es por que se los merecen o porque el pueblo no da para más. Las crisis económicas han paralizado el país en busca de una solución protestada a cacerolazos a las puertas de los bancos. Exponente del simplismo de la desesperación. El corralito debería ser para los dirigentes que no han sabido llevar una nave repleta de oportunidades a buen puerto. Pero la sociedad vive adormecida. Sólo es capaz de excitarse con la albiceleste en cualquiera de sus disciplinas deportivas, a cualquier precio y en ocasiones sometidas a la irracionalidad de la violencia. Pan y circo. Muchas imágenes de crudas revueltas en los estadios -y fuera de ellos- han llegado a nuestros telediarios y siguen repitiéndose. Para su desgracia, protagonizadas por simples ignorantes.

Las extremas medidas de seguridad y las duras
intervenciones policiales en los estadios son habituales


El extremo del aletargamiento es tal, que puede causar más influencia las palabras de Maradona que las del Presidente títiritero de turno. Así se funda la Iglesia Maradoniana cuyos preceptos podemos ridiculizar a continuación.

http://www.iglesiamaradoniana.com.ar/

Los 10 mandamientos de D10S:
  1. La pelota no se mancha como dijo D10s en su homenaje.
  2. Amar al fútbol por sobre todas las cosas.
  3. Declarar tu amor incondicional por el futbol.
  4. Defender la camiseta argentina, respetando a la gente.
  5. Difundir las palabras del "diego maradona" en todo el universo.
  6. Alabar los templos donde predicó y sus mantos sagrados.
  7. No proclamar el nombre Diego en nombre de un único club.
  8. Amar siempre los principios de la Iglesia Maradoniana.
  9. Llevar Diego como segundo nombre y ponérselo a sus hijos.
  10. No ser cabeza de termo y que no se te escape la tortuga.
Esto es el Diego Nuestro, la oración:

Diego nuestro que estas en las canchas. Santificada sea tu zurda, venga a nosotros tu fútbol. Hágase tu calidad tanto en el cielo como en la tierra. Danos hoy los goles de cada día, perdona nuestras patadas, como nosotros perdonamos la mafia napolitana, no nos dejes caer en la tentación de manchar la pelota y líbranos de Havalange. Diego.

Y el orondo ídolo drogadicto de pies embarrados contesta agradecido:

"A los fundadores de este movimiento y a los hinchas que participan les agradezco en el alma que me tengan tan presente en la memoria y en su corazon. Gracias". Diego Maradona.

Sobre estas líneas el ASPIRANTE
contra las drogas,
acaba con ellas sin dejar rastro.

Así va el país. ¿Qué esperaraban ustedes? ¿Educación británica, glamour francés o elegancia italiana? Pues no. Eso solo se encuentra en Europa. Lo penoso es que no pidan más que ostentar una federación para competir. Confío en el equipo español de Davis para doblegar las trampas y el ambiente boludo. Nosotros debemos aportar exquisitez en el juego e inteligencia como respuesta a los más que posibles estímulos desquiciantes. El complejo argentino no se cura aunque se gane un partido. El complejo sigue ahí porque es una marca indeleble de la ruindad y mezquindad personal.

Y como decía JM García, a un argentino hay que comprarlo por lo que vale -o sea, por nada- y venderlo por lo que dice que vale. Asi que menos darle al pico y más darle a la pala... o a la raqueta en este caso. Siempre serán infelices cuando miren a España porque no hay mayor diferencia ni distancia que tener clase.

No hay comentarios: